Los municipios de Rionegro, La Ceja y Marinilla, son los principales receptores de estas comunidades, la mayoría étnicas.
El incremento demográfico en la región del Oriente Antioqueño, ha representado una oportunidad para varias comunidades indígenas del departamento y otros más del país como Chocó, pues en varios municipios es común encontrarse con familias enteras de la comunidad Embera Katío, la mayoría oriundos de Dabeiba, en el Urabá antioqueño, quienes en su afán de ganarse el sustento diario, se establecen en zonas públicas donde practican la mendicidad, o rara vez la venta de algún articulo como collares y manillas.
Y es que en el Oriente Antioqueño desde hace 30 años que se tienen registros de la presencia de esta comunidad que, migró desde sud tierras a varias zonas del departamento, la mayoría ciudades intermedias, donde de una u otra forma, tienen mayor estabilidad y oportunidad frente a otros conglomerados.
Si bien es una comunidad callada que, rara vez compromete la seguridad o el orden público, son varios los casos en otras urbes como Medellín, donde los Embera han protagonizado riñas y hasta incursiones a sitios públicos, como el hecho ocurrido hace 5 meses, donde más de 200 indígenas se tomaron el edificio de La Alpujarra.
Se estima que al menos 5000 personas miembros de esta comunidad, han dejado sus tierras en los últimos 5 años.En el Oriente Antioqueño según datos del DNP, se tiene censo de 77 familias que aún habitan las calles de los municipios y algunos albergues improvisados.
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