𝗨𝗖𝗜 𝗖𝗘𝗥𝗥𝗔𝗗𝗔 𝗣𝗢𝗥 𝗜𝗡𝗘𝗙𝗜𝗖𝗜𝗘𝗡𝗖𝗜𝗔 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗚𝗘𝗥𝗘𝗡𝗖𝗜𝗔 𝗬 𝗦𝗨𝗕𝗚𝗘𝗥𝗘𝗡𝗧𝗘 𝗗𝗘𝗟 𝗛𝗢𝗦𝗣𝗜𝗧𝗔𝗟
La UCI del principal hospital que tiene Quibdó está cerrada y sigue cobrando todo los días más vidas por la negligencia de funcionarios administrativos de la Ese hospital departamental San Francisco de Asís.
Siguen las denuncian y el inconformismo del cuerpo medico en contra del Subgerente asistencial Dr carlos Alberto el cual no gestiona ni los contratos ni los trámites administrativos para los pagos de los especialistas y que debido a eso la Uci tiene ya 2 meses cerrada porque los intensivista se fueron y que muchos médicos quieren renunciar y ya no quieren ir porque les adeudan entre 5 y 7 meses de sueldo.
A este centro medico llegan todos los pacientes remitidos de los municipios aledaños, padece una crítica situación financiera, lo que ha generado la renuncia de los médicos intensivistas, razón por la cual la UCI se encuentra cerrada, teniendo que ingresar pacientes delicados de salud a Urgencias, pero sin la atención requerida.
Reporteros del informativo regional 24/7, entró al lugar y charló con miembros del sindicato y adujeron que ya algunos pacientes han muerto a consecuencia de la falta de gestión administrativa que generó la renuncia de los médicos que atienden la UCI.
Los servidores públicos sindicalizados dieron a conocer que el endeudamiento es variable y fuerte, puesto que a los médicos le deben desde 3 a 6 meses, razón por la cual se vuelve ilógica la ética profesional de los galenos, teniendo que renunciar porque también tienen necesidades que cubrir producto de su trabajo en el hospital de Quibdó.
Denuncian que la gerencia interventora ya cumplió 3 meses de haber sido nombrada, pero ahora la situación se ha vuelto peor, pues además de los salarios caídos a quienes salvan vidas, no hay insumos de ninguna clase, no hay inyectología, ni los medicamentos se encuentran disponibles para tender a una gran población que llega a solicitar servicios.
La situación en estos momento se torna peor que antes y en vez de salvarlos, ahora se ve abocado a desaparecer por las malas acciones de corrupción severa en el centro asistencial.
El paciente que ya falleció de 44 años, de nombre Vladimiro Acuña Mendoza, debía entrar a la UCI y lo ingresaron a urgencias, donde a los pocos minutos falleció por negligencia médica y de atención requerida. Ahora los familiares buscan los responsables.
El internista, Dr. Wilson Bravo, les colaboró con la contingencia del paro y aun siendo sensato y sobreponiéndose a su ética profesional antes que personal siguió laborando a pesar de las condiciones económicas, y aun así, no le pagaron. Igual situación se vive con los intensivistas que padecen del mismo problema.
El portavoz sindicalista expresó que “Es claro que la UCI, no está disponible por sus condiciones, sino porque no tienen intensivistas y el único que le quedaba, renunció hoy producto de los salarios caídos y el mal trato con ellos si cobran lo laborado” Expresó el funcionario. Ahora los medidos de comunicación buscan de igual manera una explicación que es imposible ocultar porque toda la comunidad sabe lo que ocurre en este hospital.
Los entes de control ya conocen la situación al interior de la Ese Hospital departamental San Francisco de Asís en donde los familiares del occiso afirman poner a consideración de la Procuraduría y la Contraloría las irregularidades que cobran la vida de las personas y pone en peligro a quienes solicitan servicios de salud de la sociedad y no se prestan a consecuencia de malversación de recursos y negligencia administrativa reflejada en corrupción al interior de los centros asistenciales de Quibdó.
Las enfermeras de la Ese Hospital departamental San Francisco de Asís en Quibdó, padecen del mismo problema y conocen la precaria situación que viven a diario por causa de insumos.
Muchos de los familiares de los pacientes tienen que salir a buscar las medicinas a las droguerías y farmacias cercanas para entregarlas a las enfermeras para tranquilizar el dolor que padecen los pacientes. Además, la situación se torna como un generador de violencia, pues al ver revolcarse de dolor a su familiar, optan por agredir a las enfermeras y los médicos que atienden en urgencias a consecuencia del mismo problema que no se presta un buen servicio.
La situación pica y se extiende, luego que la superintendencia de salud que conoce la situación por diferentes medios, anunció la visita al centro hospitalario para tomar los correctivos pertinentes.
Cortesía portal 24/7