La Defensoría del Pueblo llevó a cabo una jornada de monitoreo y acompañamiento en el resguardo indígena Cuti, Unguía (Chocó), en cumplimiento de una orden judicial que protege los derechos territoriales de la comunidad Emberá Katío. Esta diligencia dio seguimiento a la sentencia de 2018 que ordenó la restitución de 244 hectáreas a esta población, víctima del conflicto armado, para el desarrollo de proyectos productivos.
La violencia que azotó la región entre 1997 y 2006 provocó el desplazamiento de los hombres del resguardo, dejando a las mujeres al frente de la comunidad. Ellas resistieron y lucharon por preservar su cultura y forma de vida ancestral. El fallo judicial también contempla la protección y continuidad de su gobierno ginocéntrico (centrado en la mujer).
Gracias a la gestión de la Defensoría Regional Urabá Darién, la comunidad logró su registro ante el Ministerio del Interior, lo que les permite acceder a planes, estrategias y programas estatales para su beneficio.
Con esta visita, la Defensoría verifica el avance en el cumplimiento de las órdenes judiciales y reafirma su compromiso con la garantía de los derechos fundamentales de los pueblos indígenas.
Acciones en terreno como esta permiten no solo verificar el cumplimiento de decisiones judiciales, sino también fortalecer el diálogo directo con las comunidades, entender sus problemáticas desde su perspectiva y construir soluciones efectivas junto con las instituciones del Estado.
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