El Invima da vía libre a empresa de Bahía Solano, Chocó, para exportar productos de la pesca

0
13
  • La planta de procesamiento es la primera certificada en HACCP en la historia del departamento de Chocó.
  • La planta trabaja con pescadores artesanales de la zona, quienes han sido capacitados en calidad e inocuidad.
  • La certificación HACCP tiene una vigencia de dos años y permitirá la expansión de los productos de la pesca a los mercados internacionales.

Luego de la visita adelantada por los inspectores sanitarios y la verificación del cumplimiento de los requisitos, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos – Invima, certificó a la planta de procesamiento “Mariscos de Bahía Solano”, ubicada en Chocó, en el Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP).

La certificación HACCP otorgada por el Invima le permitirá a esta empresa, dedicada al procesamiento y comercialización de pescado, exportar los productos de la pesca artesanal a mercados como Perú, Estados Unidos, Guatemala, El Salvador, entre otros, donde se ya se han adelantado contactos comerciales. 

“Mariscos del Bahía Solano” cuenta con alrededor de 200 pescadores artesanales del municipio de Bahía Solano y de los corregimientos de El Valle, Chambacú y Jurubirá, quienes han sido capacitados en inocuidad y calidad. 

La planta de proceso dio cumplimiento a lo establecido en el decreto 60 del 2002 por medio del cual se promueve la aplicación del HACCP en las fábricas de alimentos y se reglamenta el proceso de certificación. 

“El Sistema HACCP es utilizado y reconocido actualmente en el ámbito internacional. La Comisión Conjunta FAO/OMS del Codex Alimentarius propuso a los países miembros la adopción del sistema como estrategia de aseguramiento de inocuidad de alimentos”, indicó Alba Rocío Jiménez, directora de Alimentos y Bebidas del Invima. 

“La funcionaria agregó que “es esta es la primera planta certificada en HACCP en la historia del Chocó y muestra cómo la economía popular no riñe con los desafíos de calidad e inocuidad, establecidos por los altos estándares que fija este sistema de aseguramiento. Esta certificación es muy significativa por lo que representa no solo para la empresa, sino también para toda la comunidad y el desarrollo económico de la región”. 

Durante la visita, los inspectores verificaron la organización de la empresa, el equipo HACCP, la implementación de las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM), el programa de saneamiento, la descripción de los productos de la pesca, el diagrama de flujo del proceso, el análisis de peligros y medidas preventivas, la identificación de puntos críticos de control, el establecimiento de límites críticos, el monitoreo, las acciones correctivas, los registros, los procedimientos de verificación, entre otros. 

Por su parte, Daniel Lloreda, dueño y gerente de la empresa, comentó que “el paso hacia la certificación HACCP otorgada por el Invima, no solo representa una mejora en los estándares de producción, sino también una oportunidad para romper el circulo de exclusión económica, que por tanto tiempo ha caracterizado esta región. 

 “Es un ejemplo de cómo el esfuerzo comunitario y la visión empresarial pueden transformar vidas, revitalizar economías locales y conectar a las familias con nuevas oportunidades en el mundo”, dijo. 

El proyecto también ha sido apoyado por la Unidad de Implementación del Acuerdo de Paz, de la Presidencia de la República, quienes respaldan las economías populares y el relacionamiento y articulación con el sector privado. 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí