Monseñor Mario de Jesús Álvarez habló con Noticias RCN sobre la grave situación de orden público que se vive en varios municipios de Chocó.
Sigue siendo crítica la situación en seis municipios del sur del departamento de Chocó, que viven en medio del miedo y la angustia por cuenta de los violentos del ELN y del Clan del Golfo.
La comunidad no sabe qué hacer en medio de este conflicto, que se vuelve crítico luego de las amenazas de paro armado por parte del Ejército de Liberación Nacional, las cuales han paralizado el transporte terrestre y fluvial entre los municipios.
En el puerto de Istmina, el silencio reina. Las actividades comerciales propias de la zona se vieron afectadas por esta situación que, además, mantiene confinadas a cientos de familias.
Otra de las amenazas que enfrenta la Fuerza Pública son las minas presuntamente instaladas por los violentos. Río Sucio y Sipí son los municipios más afectados.
Iglesia hace un llamado para atender la crisis en Chocó
Monseñor Mario de Jesús Álvarez, obispo de la Diócesis de Istmina-Tadó, habló con Noticias RCN sobre el delicado panorama en esta zona del país, y las condiciones en las que se encuentra la población por cuenta de la violencia.
“Esta situación no viene sino a agravar toda una historia de olvido, de promesas incumplidas, de una angustia que cada vez es mucho más sentida en Chocó y, particularmente, en la región del San Juan, Baudó y la costa pacífica chocoana”, dijo el obispo.
Además, aseguró que los habitantes son usados por los grupos armados a los que les conviene que se conozcan estas situaciones.
Monseñor también cuestionó la respuesta gubernamental que se ha dado a lo que sucede en la zona, sobre todo teniendo en cuenta la reciente crisis en el Catatumbo y las alertas emitidas con anterioridad sobre las amenazas que enfrenta la gente de Chocó.
La Fuerza Pública está, pero como que no pasara nada. Siguen los grupos, está la Fuerza Pública, no es que estemos invitando a una confrontación, pero sí una presencia y el cumplimiento de promesas en todos los temas de los que carece la gente.
Entre otras cosas, monseñor Álvarez hizo un llamado al Gobierno Nacional para que atienda las súplicas de las comunidades y las necesidades del territorio que históricamente se ha visto afectado por la violencia.