La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos alertó este jueves sobre la grave situación en el departamento del Chocó (oeste) donde hay denuncias de reclutamiento de menores y el desplazamiento de indígenas y afrodescendientes por enfrentamientos entre grupos armados ilegales.
Desde hace dos semanas, guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se enfrentan en la región del Medio San Juan con hombres del Clan del Golfo, la principal banda criminal colombiana, lo que ha dejado unos 3.600 desplazados y más de 12.000 personas confinadas, según cifras de la Gobernación del Chocó.

Las acciones armadas afectan a las localidades de Istmina, Medio San Juan, Nóvita, Sipí y Litoral de San Juan.
«Urgimos al Estado a activar todas las medidas de protección y prevención de violaciones para estas comunidades que, desde el año pasado, enfrentan múltiples vulneraciones a sus derechos humanos por las acciones de los grupos armados no estatales», añadió este jueves la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos.
Por último, la Oficina dijo que desde el 25 de enero ha documentado violaciones derivadas de los enfrentamientos entre grupos armados en el San Juan y, por eso, más de 147 familias «han sido desplazadas y otras permanecen en confinamiento».
El Ministerio de Defensa envió a la zona a 150 soldados que se suman a los 340 que ya estaban en esa parte del Chocó, con el propósito de brindar protección a la población y contrarrestar las acciones de los grupos armados ilegales.
A esto se suma que la Armada dispuso cinco lanchas artilladas para apoyar la movilidad de la tropa en su accionar contra los grupos armados ilegales.