Habitantes del municipio aseguran que estos problemas se deben, en gran medida, a la precaria atención en salud y a la ausencia del estado en ese territorio.
Mientras que la ciudad de Quibdó (Chocó) registró las mayores tasas de desempleo del país, según el Dane con un 20,6%, preocupa además que la FAO señaló que el departamento es una de las regiones de Colombia donde se tiene mayor hambre, problemática que se le suma al desempleo.
Humberto Tequia, rector de una institución del Carmen de Atrato en el Chocó, en un resguardo indígena de aproximadamente 300 personas, manifestó sus múltiples preocupaciones frente a lo que se vive en el departamento, específicamente en el Carmen de Atrato, pues aseguró que en las últimas semanas falleció un menor de edad.
«Al inicio del año falleció un niño por la situación por la que nosotros estamos preocupados como miembros de la comunidad indígena de desnutrición en los niños, la falta de seguridad alimentaria», manifestó Humberto.
Asegura que esto se debe a la falta de empleo, atención en salud y a la ausencia del estado en este territorio.
“Muchos padres de familia tienen mucha dificultades económicas y también no hay forma como deben mantener a los niños, además hay muchas enfermedades como fiebre, vómito y diarrea”, agregó Tequia.
Andrea Palacio, una habitante de Quibdó, indicó las razones por las que no encuentra empleo: “la mayor dificultad de tener trabajo es que piden varios años de experiencia y no los tenemos”, contó.
Ante esta dificultad alimentaria y de desempleo, aseguran que los padres de familia, en el desespero, tratan de cosechar su propio alimento pero son pocos los insumos que tienen para esto, por lo que la tierra no produce.
